Without hope or agenda

Desde que tengo uso de razón las comedias románticas, han sido mi debilidad y siempre me han encantado. De alguna forma, Jess tiene la facultad de trasladarse hasta la escena que están trasmitiendo e identificarse por completo con la protagonista de la película. Es así que cuando vi por primera vez “When Harry met Sally” me reconocí en la escena en la que Sally llama desesperada a Harry porque se enteró que su ex se casaba. Los que han visto la pela saben en que termina …. Y me encanta.

En “Love Actually” me identifiqué cuando Keyra Knightley recién casada recibe el mejor (para mí) saludo de Navidad. En “Two weeks notice” me veía cual Sandra Bullock peleándose con la joven y novata abogada que “supuestamente” se había acostado con Hugh Grant por un común y corriente engrapador.

Hasta el día de hoy no existía una comedia romántica con la cual no me había identificado o me haya reconocido aunque sea una pequeña parte de mi ser.

Sin embargo, el día de hoy traté de ver “The Bachelor” con Chris O’Donell y Renee Zellwegger y simplemente no la soporté. En principio porque me pareció una pela total y absolutamente machista..ok ok.. (el nombre me da a entender que todo el tema va a girar en torno a un hombre ..I know) pero más que todo me molestó el papel que desempeñaban las novias y todo el ritual perfectamente determinado y previsto para que les propongan matrimonio. Es decir, todas las novias cumplían con un cierto ritual o convención … iban a un determinado restaurante sabiendo tácitamente que su novio les iba a pedir matrimonio, los novios esperándolas nerviosos y con cierta complicidad entre ellos. La misma champagne, en el mismo tiempo récord, todo igual ....esperable, predecible.

Y ante el intento infructuoso de querer identificarse en esa situación…Jess y Jecca (Jessica en este caso no cuenta) pensaron y llegaron a una indiscutible conclusión en el supuesto en que se vean en una situación parecida (ok…lo acepto me fue completamente inevitable identificarme con esa situación).Bueno, ahí voy:

• No quiero rituales impuestos por la sociedad, familia o amigos.


• No quiero que el motivo de casarme sea porque es el siguiente paso...en ese caso... Neeeeext.


• No quiero una propuesta prevista, consabida de antemano en la que lo único que falta es la pregunta de cierre .


• No quiero anillos en copas de champagne, ni restaurantes caros, ni violines y menos quiero a cientos de miles de parejas pasando por el mismo trance.


• No quiero a La Patty cantando.


• No quiero anillos caros ni discursos tontos que terminen con un “You win”….

Simplemente…. queremos que nos SORPRENDAN con la simple razón de que no existen razones lógicas para compartir el resto de la vida juntos… como sorprendieron a Meg Ryan, a Keyra Knightley, a Sandra Bullock.

Like some say “without hope or agenda”

Será difícil??